Un trust offshore, también conocido como fideicomiso, es una entidad jurídica que proviene de la ley anglosajona y permite la administración de activos y bienes transferidos por uno o más constituyentes, llamados «settlor» o «otorgante».
Un fideicomiso offshore (trust offshore) se hace cuando el constituyente (la persona que crea el fideicomiso) transfiere capital específico del fideicomiso y prepara un acuerdo llamado un acuerdo de fideicomiso (o escritura de fideicomiso, o declaración de confianza) en el que nombra a un Trustee (la persona a cargo del fideicomiso y un beneficiario (la persona que se beneficia del fideicomiso).
El fideicomiso offshore permite la transferencia legal de la propiedad, se utiliza para la protección de activos y/o patrimonios y para organizar la sucesiones (en este caso el fideicomiso sustituye a un testamento).
El trust offshore es generalmente administrado por un agente de gestión offshore «fiduciario», que beneficia a una serie de individuos o empresas nombradas en la constitución del fideicomiso.
Es, en definitiva, una transferencia de bienes o capital de particulares o corporaciones, pero con la diferencia de que este poder legal se aplica en una jurisdicción offshore. De esta manera, este marco se beneficia de los privilegios y el secreto de los paraísos fiscales.